Realmente los cascos japoneses causan asombro y admiración por su belleza y colorido. Los guerreros Samuráis eran combatientes muy valientes e impresionaban no solo por su disciplina y su forma de luchar sino también por sus trajes de combate que acompañaban con esos cascos japoneses tan artísticos y tan llamativos.
Los cascos japoneses datan del siglo V y tenían una cresta central muy pronunciada. Los más conocidos eran los Kabutos y eran una parte importante en el equipamiento de los Samuráis, a los que se les atribuía una significación simbólica.
Son cascos muy elaborados y ceremoniales, además de sofisticados. Los más lujosos siguieron siendo elaborados hasta un poco después del fin del período Edo, en 1867.
El kabuto o casco japonés estaba asegurado a la cabeza mediante un cordón denominado shinobi-no-o que estaba atado por debajo del mentón.