Una réplica es una copia de alguna obra artística o antigua que se reproduce prácticamente igual a la original. Las monedas medievales eran piezas de material resistente, generalmente en forma de disco que se empleaba como medida de cambio.
Las primeras monedas fueron impresas entre el siglo VII-VI A.C. Las monedas originaron un sistema monetario importante que cambió el tradicional sistema de trueque.
Las monedas medievales solían tener una cara o faz que llevaba el busto o efigie del rey, persona o alegoría, así como la fecha de acuñación. Y un reverso donde se indicaba el valor monetario o medida de valor.
La principal moneda española entre los siglos XVI y XIX fue el real de a 8 o moneda de 8 reales, esta nació con Carlos I y desapareció bajo el nombre de 20 reales de vellón con Isabel II.
Durante estos años, existieron monedas de cobre (maravedís), plata (reales) y oro (escudos). Hubo monedas de 1, 2, 4, 8 y 16 maravedís, 1/2, 1, 2, 4 y 8 reales y 1/2, 1, 2, 4 y 8 escudos.
La moneda española de oro a martillo -escudos de a uno, dos y cuatro- tenían la leyenda usual “HISPANIARVM REX” en todas las cecas del Reino.