Esta espada-estoque es atribuida a D. Gonzalo Fernández de Córdoba, el Gran Capitán. Este ejemplar tenía condiciones específicas para el combate y no era una espada de parada.
Se llevaban pie a tierra colgada del cinturón y a caballo, en el arzón de la silla. También se les conoce como espadas de mano y media o bastardas.
- GUARNICIÓN: para mano y media o bastarda, de cruz de hierro barnizada de negro. Pomo en forma de pera, que con el puño, encordado y forrado de cuero negro, ayudan a sujetar el arma con las dos manos. Arriaz formado por dos gavilanes inclinados hacia la hoja y que van aumentando su grosor según se acercan al final. Luce dos puentes, uno en la parte frontal en forma de arco y el otro en la trasera en oblicuo, ambos como protección de la mano.
- HOJA: recta, ancha y llana, con una estría hasta la mitad y dos pequeñas en el recazo. Toda ella a dos filos y la punta recortada.



Espada Estoque del Gran Capitán (siglo XVI)
Real Armería de Madrid – PATRIMONIO NACIONAL
Autor: Vicente Toledo Momparler (espadólogo)